Con mucha alegría quiero contarles sobre mis dos visitas a las Instalaciones de la Emisora y con mucho jubilo expreso lo agradecida que estoy con Nuestro Señor por darme la oportunidad de compartir con la familia de Radio Inmaculada. Siento una profunda admiración por cada uno de sus miembros que con abnegada entrega día a día trabajan sin interés personal alguno.

Recibí muchas bendiciones en ambas visitas pero principalmente porque conocí a quienes aman al Señor profundamente y viven para ÉL, quienes trabajan horas y horas para llevar bendición a los demás sin recibir nada a cambio , viviendo de la Divina Providencia.

Aprendí a reconocer el valor del sacrificio por amor a Dios y sus enseñanzas.