Cuarto Día
ORACIÓN PARA EL 53° CONGRESO EUCARÍSTICO INTERNACIONAL QUITO 2024
Señor Jesucristo,
Pan vivo bajado del cielo:
Mira al pueblo de tu corazón que hoy te alaba, te adora y te bendice.
Tú que nos reúnes alrededor de tu mesa para alimentarnos con tu Cuerpo, haz que superando toda división, odio y egoísmo, nos unamos como verdaderos hermanos, hijos del Padre Celestial.
Envíanos tu Espíritu de amor, para que buscando caminos de fraternidad:
paz, diálogo y perdón,
colaboremos para sanar las heridas del mundo.
Amén
Por una Iglesia sinodal
«Que se amen los unos a otros; como yo los he amado» (Jn 13, 34)
Es un tiempo muy importante
No podemos considerar el tiempo de la Cuaresma como una época más, que simplemente viene y va cada año como una repetición cíclica. No, este es un tiempo único; es un auxilio divino que hay que recibir con total disposición. Jesús camina con nosotros y nos invita a construir nuestra vida en Él.
En la vivencia cuaresmal de nuestra fe, no solo fortalecemos y purificamos nuestra piedad y devoción, sino que renovamos nuestra esperanza y afianzamos la caridad, además de acrecentar el espíritu de penitencia que nos invita a la purificación. No reduzcamos este tiempo a una ocasión para hacer obras de mortificación, no dejemos escapar el profundo sentido de vida cristiana que contiene la espiritualidad cuaresmal.
Reconexión
Quisiera invitarte a vivir en este año un profundo proceso de restauración, que la cuaresma sea la oportunidad para unirnos profundamente al Señor y encontrar nuevamente nuestro camino con y hacia Él, bebamos de la fuente del agua viva, permitámonos sentir el amor que el Maestro nos tiene.
No olvides que la vida de fe, es un camino hacia la vida, la Pascua.