Jesús libera a un endemoniado
[vc_row][vc_column width=”1/4″][vc_column_text] Jesús fue al otro lado del lago de Genezareth y allá se encontró con un endemoniado feroz que era el terror de todo el vecindario. Los demonios le pidieron al Señor que los enviara a unos cerdos que estaban por allí. Jesús se los permitió y aquellos animales se precipitaron al mar (Lc…